Como cada año, el 21 de julio Omega celebra el aniversario de la llegada del hombre a la Luna. Aquel momento histórico en el que el astronauta Buzz Aldrin, con su Speedmaster en la muñeca, pisó suelo lunar. Es así como el reloj de la Luna se convirtió en leyenda.  

Un día como hoy de hace ya 54 años, la humanidad pisó por primera vez la Luna. Era el 21 de julio de 1969 y pilotando el módulo lunar del Apolo 11, el astronauta norteamericano Buzz Aldrin alunizó en el Mar de la Tranquilidad. En su muñeca, su inseparable e infalible reloj Omega Speedmaster Professional. Un modelo que se convertiría, de esta manera y ante los ojos del mundo entero, en el primer reloj utilizado en La Luna. 

El reloj de la Luna, <strong>Omega, Buzz Aldrin y el reloj de la Luna</strong>
Desde su alunizaje en julio de 1969, elOmega Speedmaster Professional es toda una leyenda

Un gran paso para la humanidad

La historia es de sobra conocida, pero no por ello merece dejar de recordarla. Aquella gesta que supuso un gran paso para la humanidad abrió el camino hacia las estrellas. 

Pero no solo para la ciencia y la exploración estelar. También para Omega aquello supuso un paso de gigante. Tanto es así que su imagen, a pesar de sus muchos éxitos en el descenso a las profundidades abisales, en el cronometraje olímpico e incluso en el cine, sigue fundamentalmente vinculada a aquella hazaña histórica. 

Aldrin y el Speedmaster 321

Una hazaña que, como no podía ser de otro modo, Omega recuerda cada año. Así, el año pasado, por ejemplo, realizó un nuevo retrato de Buzz Aldrin con el Speedmaster 321, el reloj que alberga el legendario calibre impulsor de todos los Speedmaster que se llevaron en La Luna. 

El reloj de la Luna, <strong>Omega, Buzz Aldrin y el reloj de la Luna</strong>
Buzz Aldrin con su Speedmaster 321 en una foto de 2022

Y es que, desde el Apolo 11 al Apolo 17 todos los astronautas llevaron este célebre calibre, que tantas alegrías ha dado a Omega, en el corazón de sus relojes. El motivo era claro: precisión y fiabilidad. Dos conceptos imprescindibles cuando de una misión tan arriesgada se trata.

Lo cierto es que, como reconoce la propia marca helvética, “el Apolo 11 sigue siendo el momento más extraordinario de la larga herencia de Omega en el espacio”. ¡Larga vida al reloj de la Luna!

El reloj de la Luna, <strong>Omega, Buzz Aldrin y el reloj de la Luna</strong>
En el reverso del Speedmaster se indica que fue «el primer reloj llevado en la Luna»