Para celebrar el 75º aniversario de su icónico Seamaster, Omega presenta una extensa colección de relojes que ha denominado Seamaster en Summer Blue, en los que el azul veraniego es el denominador común.
Fue en 1948, justo un siglo después de su fundación, cuando Omega, que había atesorado un enorme conocimiento en la producción de relojes para la Armada y la Real Fuerza Aérea británicas durante la Segunda Guerra Mundial, creó el Seamaster. Fuerte, preciso, resistente, robusto y elegante, este icónico reloj ha cumplido 75 años y para celebrar tan importante acontecimiento la manufactura de Bienne ha lanzado una colección de once relojes de siete modelos diferentes que ha bautizado como los Seamaster en Summer Blue.
El elemento común en todos ellos, como indica su nombre, es el color azul del verano que salta a las esferas. Un color utilizado para reflejar la resistencia al agua de cada uno de estos nuevos Seamaster. Desde el azul de las aguas bañadas por el sol de los Aqua Terra al azul abisal del Ultra Deep.
De los 150 a los 6000 metros
Además de su color azul en distintos tonos, esta nueva colección de relojes Omega tiene en común su resistencia al agua, que va desde los 150 metros de los Aqua Terra hasta los 6000 metros del Ultra Deep, pasando por los 300 metros del Seamaster 300 y el Diver 300, los 600 metros del Planet Ocean y los 1200 metros del Ploprof.
Si una X marca el lugar, la intensidad del azul nos indica efectivamente la profundidad de resistencia. Desde los 150 metros de los Aqua Terra y el Worldtimer hasta los 1200 metros del PloProf, la intensidad del color varía sutilmente.
En todas las esferas hay una gradación del color desde el centro, más claro, hacia el perímetro del cuadrante, más oscuro. Los índices horarios y las agujas están recubiertas en todos los modelos de una Super-LumiNova exclusiva en azul claro.
Poseidón con su tridente
Otra característica común en los relojes es la tapa conmemorativa del fondo de la caja decorada con un grabado del dios Poseidón con su tridente y dos caballitos de mar. Todos ellos en cajas de acero noble pulido y cepillado de gran belleza.
Omega testa sus relojes en el Swiss Federal Institute of Metrology (METAS) y los certifica de acuerdo a las normas de este organismo. Es decir, la fiabilidad de los relojes de la colección está asegurada. Los precisos mecanismos de sus calibres cuentan con el escape Co-Axial Master Chronometer, por lo que «la precisión a todos los niveles», como dice la marca, está garantizada.
Las líneas depuradas de los Aqua Terra
De esta familia Aqua Terra, para la ocasión, Omega ha presentado tres modelos diferentes de 38 mm, 41 mm y un Worldtimer de 43 mm. El Aqua Terra de 38 mm de diámetro carga un calibre 8800, y es resistente al agua hasta 150 metros. Su esfera color summer blue está cepillada con efecto soleado e índices en forma de velero. Ventana circular a las 6h para la fecha con fondo azul de la colección. Brazalete de acero noble pulido y cepillado. Todo un conjunto de líneas puras. Precio: 7.500 euros.
El Aqua Terra de 41 mm de diámetro, sumergible también hasta 150 metros, carga el calibre 8900, y hace gala de una esfera en forma de listones de teca color summer blue, cepillado solar y barnizado degradado. Ventana a las 6h para la fecha con fondo azul. Brazalete de acero noble pulido y cepillado o correa de caucho azul. Precio: 7.200 euros con brazalete de acero y 6.900 euros con pulsera de caucho.
La Tierra vista desde el Polo Norte
El Aqua Terra Worldtimer de 43 mm de diámetro, con calibre 8938, es también impermeable hasta 150 metros. En el centro de la esfera, rodeada por el disco de los 24 husos horarios, divididos en día y noche por dos tonos distintos de azul, hay una imagen de la tierra desde la posición del Polo Norte rodeada del azul de los océanos. La imagen ha sido obtenida mediante ablación por láser y la posterior coloración de una placa de titanio grado 5. En el disco de las ciudades referentes para cada huso horario, en la posición habitual de la ciudad de París aparece Bienne, un pequeño homenaje al lugar donde nacen los relojes Omega. También puede optarse en este modelo por un brazalete de acero noble pulido y cepillado o por una pulsera de caucho azul. Precio: 10.700 euros con correo de caucho y 11.000 euros con brazalete de acero.
Seamaster 300 y Diver 300
Tanto el Seamaster 300 como el Diver 300 son, evidentemente, sumergibles hasta los 300 metros de profundidad. El primero de ellos, el Seamaster 300 tiene un diámetro de 41 mm y alberga el calibre 8912. Es todo un clásico recuperado, con esfera barnizada summer blue que refleja el aumento de la resistencia al agua y con bisel giratorio bidireccional y doble código de luminiscencia. Posición cero del bisel y aguja de los minutos con Super-LumiNova convencional y en resto, índices, números y agujas de horas y segundos con Super-LumiNova summer blue. Precio de 8.000 euros con brazalete de acero.
El Diver 300 tiene 42 mm de diámetro y carga el calibre 8800. Su esfera es de cerámica con diseño ondulado, barnizada con acabado degradado para dejar claro su resistencia al agua. Válvula de escape de helio, bisel giratorio bidireccional en cerámica azul con escala de inmersión, Índices en relieve rellenos en bloque de Super-LumiNova summer blue, agujas esqueleto rodiadas, también con doble código de luminiscencia. Opción de brazalete de acero o correa de caucho azul. Precio: 6.400 euros con correa de caucho y 6.800 euros con brazalete de acero.
Planet Ocean, un profesional muy elegante
Lanzado en 2005 con un característico bisel naranja, el Planet Ocean es resistente al agua hasta una profundidad de 600 metros. En sus 39,5 mm de diámetro, alberga el mismo calibre que el Diver 300, el 8800. Es, sin duda, todo un profesional pero muy elegante. Su esfera de cerámica tratada con PVD barnizada con acabado degradado con índices y agujas rellenos de Super-LumiNova es, igualmente, de color azul verano. El bisel giratorio bidireccional, también cerámico, tiene la escala de buceo en azul claro. Precio: 8.000 euros con brazalete de acero.
Ploprof, el “buzo profesional”
Reloj único, con caja monobloque en O-megasteel, el Ploprof se creó a comienzos de la década de los 70 del pasado siglo. Ahora, en su versión summer blue, el Ploprof forma parte de la celebración del aniversario, compartiendo todos los códigos estéticos de sus hermanos de colección. El “buzo profesional”, con su calibre 8912, es resistente al agua hasta 1200 metros de profundidad. Tiene el innovador sistema para fijar el cristal a la caja monobloque que hace innecesaria la válvula de escape de helio. El aro del bisel es un cristal de zafiro con el reverso barnizado en azul que muestra la escala de inmersión en azul claro en contraste con los otros azules del reloj. En esta edición la caja también incluye su celebre corona atornillada. El pulsador de seguridad, situado a las 2h, y está recubierto para la ocasión por un aro de cerámica azul. Una correa de caucho perforada y un grabado original en el fondo de la caja, a través del cual, por cierto, no puede accederse al movimiento del reloj, completan sus señas de identidad. Precio: 15.400 euros con correa de caucho.
Ultra Deep, hasta los abismos marinos
Probado en condiciones reales en la fosa de las Marianas durante su desarrollo, el Ultra Deep, calibre 8912, resiste la presión de los 6000 metros y cumple las normas ISO para relojes de buceo de saturación. Caja de 45,5 mm de diámetro construida, como el brazalete, en O-megasteel. Su impresionante esfera lacada reproduce el fondo de la sima Challenger, cartografiada por el equipo Five Deep, transmitiendo una lograda sensación de profundidad. Aplicando una luz ultravioleta a la esfera aparece sobre el perímetro de las fosas abisales el mensaje “Omega Was Here” para testimoniar precisamente que Omega estuvo allí. A los 10.935 metros de profundidad. El fondo de la caja homenajea el logo original de la colección Seamaster, diseñado en los años 50 por Jean-Pierre Borle: Poseidon/Neptuno, el tridente y los dos caballitos de mar. Precio: 14.100 euros con brazalete de acero.