El rey del equilibrismo, Nik Wallenda, ha logrado, acompañado de su nuevo JEANRICHARD Terrascope, una nueva hazaña sobre los rascacielos de Chicago, consiguiendo dos nuevos récords en su palmarés.

Las piezas de JEANRICHARD se dirigen, generalmente, a los apasionados de los desafíos, aventureros a la conquista de lo desconocido que viven cada instante como si fuera el último. Por esa razón, no es de extrañar que uno de sus actuales embajadores sea el funambulista estadounidense Nik Wallenda, quien el pasado fin de semana ha logrado una nueva gesta atravesando con los ojos vendados, sobre cable de acero de una pulgada y sin red de seguridad, los 138,3 metros que separan las Marinas Towers y el Leo Burnett Building, dos de los legendarios rascacielos de Chicago.

Durante 8 minutos, fieles seguidores y periodistas llegados de todo el mundo, y los telespectadores del canal Discovery Channel han podido seguir cada uno de sus calmados pasos. La primera parte de la peligrosa travesía comenzaba a una altura de 180 metros desde la torre Marina City West, avanzando por una pendiente con hasta 19 grados de inclinación, y aumentando cerca de 25 metros hacia el Leo Burnett Building, estableciendo el Primer Récord del Mundo de travesía en equilibrio con tal inclinación en 6 minutos y 52 segundos, con ráfagas de viento de hasta 40 km/h. La segunda parte del trayecto se llevó a cabo en 1 minuto y 17 segundo desde la torre oeste Marina City a la este a una altura de 165 metros, con los ojos vendados, estableciendo el segundo Récord del Mundo por la travesía más alta realizada con los ojos vendados.

JR Terrascope WallendaEs la segunda vez que Wallenda lleva en su muñeca un JEANRICHARD Terrascope mientras realiza una proeza de estas características. En esta ocasión, la pieza es una edición especial de 44 mm de diámetro con movimiento JR60 de cuerda automática; frecuencia de 28.800 alternancias/hora; reserva de marcha de 38 horas; funciones de horas, minutos, segundos y fecha; y hermeticidad a 100 metros.

Sobre la caja de acero inoxidable pulido y satinado vertical, destaca el bisel grabado inspirado en el cable sobre el que deambula y el logo de Nik Wallenda sobre la esfera gris cepillada, acompañados por los índices y agujas rodiados con material luminiscente. La elegante pieza se presenta con correa de caucho negro y cierre desplegable de acero inoxidable.