Los preciosos biombos de Coromandel recubiertos de laca negra con escenas cotidianas chinas o motivos paisajísticos, que tanto gustaban a la diseñadora Coco Chanel, son el motivo de inspiración de esta sublime colección.

La habilidad y maestría de esmaltistas, grabadores, escultores y engastadores de la maison Chanel han hecho posible esta nueva colección de Mademoiselle Privé, en la que los célebres biombos chinos de Coromandel utilizados por la gran genio de la moda del siglo XX Coco Chanel, tanto para separar ambientes como esconder puertas en sus apartamentos de la Rue Cambon y del Ritz de Paris, se han convertido en protagonistas absolutos de sus exquisitas esferas.

En la obra “Chanel Solitaire”, escrita por Claude Delay, Chanel confesó su gran amor por los biombos chinos desde que tenía 18 años. “Casi me desmayo de alegría cuando, entrando en una tienda de mobiliario chino, contemplé un Coromandel por primera vez”. Amor que ahora se hace más patente a través de estos cinco nuevos modelos con decoraciones ligeramente diferentes, en los que varios pájaros en miniatura tallados, mediante la técnica ginebrina del esmalte Grand Feu, en oro de 18 quilates de color beige –aleación exclusiva de la casa producida en homenaje al gusto de Chanel por esta tonalidad neutra– entre delicadas flores en nácar blanco y sinuosas ramas, revolotean sobre el fondo de su esfera en ónix negro subrayando el refinamiento de cada escena.

Todos ellos se presentan con caja de oro de 18 quilates de color beige de 37,5 mm de diámetro con diamantes en engaste de nieve, son resistentes al agua hasta los 30 metros, y están impulsados por una alta precisión de movimiento que ofrece funciones de hora y minutos. La correa es de piel de cocodrilo negro Mississippiensis con una hebilla de oro color beige de 18 quilates con 80 diamantes talla brillante (~0.49 ct).

Precio aprox.: 250.000€